A pocos metros de la casa de la urbanización Populandia donde cayó el cuerpo de Luis Guillermo Núñez Ospino, de 22 años, quedó la bicicleta en la que acostumbraba a movilizarse y en la que esa noche, hasta entrada la madrugada del domingo, visitó a su novia, con quien se casaría el próximo diciembre.
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La muerte de Luis Guillermo Núñez, oriundo de El Difícil Ariguaní, Magdalena, se produjo minutos después de recibir un disparo en la espalda. Sobre el ataque a este joven, dedicado a la albañilería desde hace dos años cuando se radicó en Valledupar en busca de mejores oportunidades, se presume que se presentó al resistirse a unos delincuentes que pretendieron despojarlo de sus pertenencias.
“Él no se metía con nadie, era muy tranquilo, juicioso y trabajador, pero era demasiado testarudo, y como se había tomado unas ‘cervecitas’ en la casa de su novia (por el sector del CDV), lo más seguro es que se sintió valiente y enfrentó a los atracadores, quienes al final no le quitaron sus cosas”, sostuvo Leinis Núñez, hermana de la víctima.
Leinis junto a varios familiares más, se trasladó desde el municipio de El Difícil Ariguaní, Magdalena, al enterarse de la trágica noticia. “Nos llevaremos el cuerpo para el pueblo”, dijo uno de los familiares.
Según sus allegados, Luis Guillermo llegó a Valledupar a vivir a casa de una hermana, luego de terminar sus estudios de bachillerato y empezó a trabajar en el oficio de la albañilería: “le estaba yendo bien, ya había aprendido a enchapar”, dijeron algunos de sus familiares.
Se conoció además que, ante el regreso de la hermana de Luis Guillermo a su pueblo natal, éste vivía con una pareja en la Manzana 4 Casa 14 de la urbanización Populandia, cerca del lugar donde se presume que en medio de su agonía, intentó pedir auxilio, pero las fuerzas no le alcanzaron. “Cuando la vecina le abrió la puerta, él se desplomó”, dijo uno de los allegados.
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