De tres impactos de bala en la cabeza fue asesinado en la noche del 28 de diciembre en El Difícil, un sujeto al que las autoridades identificaron como Álvaro Rafael Peña Baldonado, quien fue sorprendido por un sicario mientras charlaba como de costumbre en cercanías del “Puente de Alfonso Barraza” en el barrio Alfonso López.
Peña Baldonado, de 32 años, también conocido en el gremio de firmadores y matarifes como el “Mono Peña”, residía en el barrio Loma Fresca y se dedicaba desde hace tiempo en el comercio de chivos y cerdos, que luego colocaba en varios expendios de esta localidad para su venta al detal.
El comerciante era hijo de Julián Peña (fallecido) y Martina Baldonado, siendo el sexto de siete hermanos, de estado civil soltero y sin relación conyugal conocida.
Quien asesinó al comerciante, lo abordó casi que amparado por la oscuridad que reina en gran parte de ese sector, donde también hay acceso a los barrios Loma Fresca y El Carmen. Prácticamente a quemarropa descargó parte del proveedor de una pistola calibre 9 mm, de la cual tres balas penetraron por el parietal derecho de Peña produciendo su muerte de manera instantánea.
A cerca del homicida de Peña Baldonado y quien truncó la normalidad que la temporada decembrina ofrecía hasta el momento, los residentes del barrio Alfonso López manifestaron no haber visto nada, pero sí escucharon cinco fuertes detonaciones con que se alteró la tranquilidad en el sector.
La vecindad se percató de lo que había sucedido cuando encontraron a la victima tendida en el piso boca abajo, con parte del cuero cabelludo abruptamente levantado en el lado derecho de la cabeza y un largo chorro de sangre que corría falda abajo.
Sin embargo algunos transeúntes dijeron haber visto a dos individuos salir del sector a bordo de una motocicleta roja a toda velocidad, constituyendo esto para las autoridades una pista importante para dar con la captura de los criminales.
Los investigadores tratan de establecer igualmente si el homicidio tiene que ver con las actividades que desempeñaba Peña Baldonado o son de otra índole, como la venganza, aunque sus familiares dijeron desconocer si el comerciante tenía enemigos o había sido amenazado alguna vez.
Hasta el sitio de los hechos se trasladó de inmediato una patrulla de la estación local de policía, al mando del teniente Hegel García Medina, para lo concerniente a las tareas investigativas preliminares y acordonamiento del sector. El levantamiento del cadáver fue efectuado por personal de la fiscalía con sede en Plato.
Junto a la motocicleta de su propiedad cayó tendido el “Mono Peña”, producto de las certeras balas que impactaron su cráneo.
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