En el asfalto yace el cuerpo de Francisco De Ángel Galindo, quien resultó aplastado por la buseta luego que el chofer perdiera el control por una falla en la dirección.
Una persona muerta y siete más heridas es el saldo de un trágico accidente ocurrido hacia las 10 de mañana de ayer, cuando una buseta de servicio público afiliada a la empresa Cootracegua se volcó aparatosamente luego de sobrepasar la localidad de El Difícil.
El automotor de placas URI 360, con numero interno 530, que cubría la ruta Valledupar – Santana con 25 pasajeros a bordo, se descontroló y rodó por el asfalto luego de experimentar una falla mecánica en la dirección, según el reporte entregado por la policía de carreteras.
La víctima fatal de este accidente resultó ser el ayudante del automotor, el cual fue identificado como Francisco de Ángel Galindo, de aproximadamente 40 años de edad, natural de la población de Plato, pero residente hace muchos años en la capital del Cesar donde dedicó gran parte de su vida a la ocupación de auxiliar de transporte público.
De Ángel Galindo quedó debajo de la buseta con la mayor parte de su cuerpo aplastada, luego que el vehículo se inclinara hacia el costado donde habitualmente se ubican los ayudantes. Las autoridades creen que el auxiliar murió de forma instantánea al impactar el automotor con el asfalto, a partir de lo cual su cuerpo rodó junto a la carrocería por varios metros.
De las siete personas lesionadas en este trágico hecho vial, sólo una revistió la seriedad necesaria para ser remitida a Valledupar a fin de ser intervenida quirúrgicamente; se trata de Julia Niño Hurtado, de 52 años de edad, quien sufrió fractura en la muñeca del brazo derecho y laceraciones en distintas partes del cuerpo.
Los heridos restantes fueron examinados y curados en la sala de emergencias del hospital “Alejandro Maestre Sierra” de El Difícil, donde después de una hora fueron dados de alta. Estos fueron identificados como Víctor Manuel Bossio Contreras, de 49 años de edad; Diego Navarro Hernández, de 15; Andrés Barrios Jiménez, de 21, Oledys del Carmen Galván Ortiz, de 24; Diana Villa Fernández, de 22 años y con cuatro meses de embarazo; así como el segundo hijo de ésta, Tomás Turizzo Villa, de 3 años de edad.
TODO FUE RÁPIDO
Para el conductor del automotor, José María Cala Torres de 53 años y natural de El Banco, Magdalena, la falla mecánica que acusó la buseta casi a mitad de camino no le dio tiempo de reaccionar a pesar de la baja velocidad en que marchaba. “Todo fue rápido, no tuve chance de maniobrar”, dijo.
Lo expresado por el chofer fue corroborado por los pasajeros, como es el caso de Gleidis Cantillo, quien igual que otros miembros de su familia, salió ilesa de este fatal accidente de manera afortunada. La mujer aún asustada, dice que iban a prudente velocidad, pero de un momento a otro el “vehículo dio una vuelta y empezamos a caer unos encima de los demás”.
Tras la inspección efectuada por la policía de carreteras en cada una de las partes mecánicas del automotor, se pudo constatar que la dirección se había roto, constituyéndose en pieza clave para direccionar la investigación.
Conocido el hecho las autoridades recomendaron a las empresas transportadoras ser más rigurosas al momento de despachar los vehículos, ya que la prevención es factor vital para garantizar la normalidad en las carreteras.
En esta materia estuvieron muy atentas a lo expresado por los pasajeros del malhadado automotor, ya que se quejaron del deterioro que algunos vehículos evidencian. “Es lamentable que pongan a trabajar a estos carros tan viejos, sólo por ganarse una plática de más en épocas como ésta”, dijo Vicky Navarro, otra de las afectadas.
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