Aún sin reponerse del sensible fallecimiento del humorista Darío Gómez, la trágica muerte de las damas María Teresa Baena Meza y Celestina Tovar Aragón, como de la más reciente partida del menor Juan Carlos Castilla Batista, la comunidad dificilera ahora tiene que llorar el deceso de “Juancho Paulino”, quizás el más reconocido de todos nuestros personajes populares.
“Juancho Paulino”, cuyo nombre de pila bautismal fue Juan Bautista López Campo, murió este viernes en una clínica de Barranquilla, luego de no recuperarse de politraumatismos severos que le produjo, a mediados de mayo pasado, el choque de su motocicleta con un tractor que se encontraba estacionado en el kilómetros 2 de la vía que de El Difícil conduce a la vecina municipalidad de Plato.
“Juancho” nació en El Difícil el 24 de junio de 1956 y estuvo casado con Elizabeth Infante, unión de la cual queda una hija: Mayda de Jesús López Infante. Era hijo de Paulino Lopez (fallecido) y Ana Santiaga Campo. Fue precisamente el nombre de su padre lo que condujo que a él y sus hermanos les bautizaran como "Los Paulinos". Desde temprana edad mostró su apego por la música, vocación que lo llevó a integrar el muy aplaudido “Grupo J”, entre 1978 y 1984, al lado del guitarrista Jorge Viloria; Jaime Rafael Ospino, el popular “Gulliver” y su hermano Mariano López, singular interprete de la “Hojita” y quien muriera el año anterior víctima de una enfermedad terminal.
Durante muchos años estuvo al frente del grupo de tamboras "Familia", con el cual animó muchas de las festividades carnestoléndicas y santorales de El Difícil y sus alrededores. Incontables fueron las ocasiones en las que alternó con agrupaciones vallenatas, alcanzando en concurridos conciertos igual reconocimiento que los grandes. “Juancho”, además de cantante sacó a relucir sus cualidades de mimo, cuentachistes e imitador. Entre sus mejores parodias se recuerda las alusivas a Diomedes Díaz, Juan Gabriel y Julio Iglesias.
Cuando no estaba actuando o trabajando este brillante personaje se rebuscaba por las tardes vendiendo, con admirable jocosidad y mucha creatividad, “pasteles de pavo real y avestruz”; “chinchurria de elefante”, así como “bofe, pajarilla y ubre de león motilao”, viandas que según él eran efectivas contra “la vena varice, la caída del cabello y la trombosis”.
Sus honras fúnebres se cumplieron el sábado 11 de julio a las 4:oo p.m. en la iglesia del Santo Cristo, en medio del golpeteo de tambores, los cantos y la presencia de alumnos y compañeros de la Casa de la Cultura "César de León", donde fungía como instructor de percusión. Esa tarde hasta el cielo pareció sacudirse lamentando su partida, puesto que una fuerte tronada acompañó el féretro y una ligera llovizna fue un símil del llanto que embarga a la cultura de Ariguaní.
Desde Ariguaní al Día expresamos a su familia nuestras más sentidas condolencias.
Juancho siempre era invitado para animar las visitas de personajes importantes de la vida pública nacional. Aquí con el ex alcalde de Barranquilla y fundador del Movimiento Ciudadano, Bernardo Hoyos Montoya.
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