La primera denuncia por constreñimiento al sufragante fue conocida ayer en Ariguaní por el comité de
seguimiento electoral en esta municipalidad, luego que la ciudadana Liris Esther Abad Valle acusara a una funcionaria del Incoder de haberla amenazado con quitarle un lote de tierra que le fue adjudicado si no votaba por el candidato a la cámara Pedro Aguirre Racimes.
La queja fue interpuesta inicialmente ante la Personería Municipal por considerarse una violación al derecho constitucional al libre ejercicio del voto y atendida posteriormente por la mesa judicial instalada para atender este tipo de casos, la cual está conformada además, además del representante del Ministerio Público, por el juez promiscuo en Ariguaní y el delegado de la fiscalía seccional.
La denuncia fue revelada a HOY DIARIO DEL MAGDALENA por la concejala de Ariguaní, Nayibe Velasco Aguilar, quien de manera coincidencial se encontraba charlando con la afectada en el momento de los hechos.
Tanto la agredida como Velasco Aguilar afirman que intempestivamente fueron abordadas por la funcionaria del Incoder, Rosa Ruíz, quien sin mediar palabras ni tener pruebas contundentes le advirtió de forma tajante a Liris Abad Valle “que si no votaba por racimes no le entregaba las 10 hectáreas de tierra que le habían adjudicado”.
La concejala dijo haber abordado pocos minutos después a Ruíz para decirle que sus sospechas eran “infundadas” y que la conversación que sostenía con la adjudicataria de población desplazada se remitía a situaciones de tipo personal y no de corte político.
“Pero aún así –añadió Velasco Aguilar- la señora Rosa Ruíz no hizo más que ratificarse en sus amenazas, diciendo que sus advertencias eran en serio y que si llegaba a comprobar que alguno de los comprometidos no votaba por Racimes lo sacaba del programa”.
“Considero que la señora Ruíz no debe tratar a los electores de esa manera, sobre todo porque se está tipificando con eso una perturbación al certamen democrático de este domingo, ya que es claro que se está constriñendo al votante”, señaló la dirigente.
Lamentó seguidamente que “este tipo de casos se estén presentando en Ariguaní, especialmente con los desplazados, que no sólo son víctimas de las patrañas electoreras, sino eternos perjudicados con el juego en que algunos los mantienen pese a sus grandes necesidades”.
“Esto en materia política es demasiado serio para esta gente, además de que no se les está dando la ayuda necesaria y en muchas ocasiones se les deja de entregar la tierra para adjudicárselas a otros que en su vida no han sembrado una mata de yuca”, expresó Velasco.
La afectada por su parte indicó que espera que las autoridades tomen cartas en el asunto, puesto que no quiere verse fuera del listado de adjudicatarios en el Incoder, porque la tierra que le prometieron “es lo único que necesito para salir adelante en la vida y mantenerles la esperanza a mis cinco hijos”.
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